Capitanía General de Venezuela
De La Venciclopedia
El rey Carlos I de España firmó en Madrid la real cédula del 27 de marzo de 1528, por la cual quedaba constituida una provincia ubicada, a la letra del instrumento jurídico, en la forma siguiente: «Del Cabo de la Vela y Golfo de Venezuela y el Cabo de San Román y otras tierras, hasta el Cabo de Maracapana». El Cabo de La Vela subsiste como toponimia en la península de la Guajira. Maracapana desapareció después de la organización de la provincia de Nueva Andalucía, o Cumaná, a partir de 1568. Se denominó Maracapana a un girón de tierra situado en la costa cumanesa, posiblemente en lo que hoy es Pozuelos (distrito Sotillo del estado Anzoátegui). La real cédula establecía las condiciones de una capitulación entre el Estado español y 2 vasallos de Carlos I -en su calidad de Emperador de Alemania- en el momento en que ejerce ambas potestades, Carlos V, emperador de Alemania y Carlos I, rey de España. Los vasallos alemanes eran Enrique Ehinger y Jerónimo Sailer, quienes recibían la autorización real para avituallar una armada y organizar una expedición a la tierra ya conocida entre el Cabo de la Vela y la costa cumanesa que había comenzado a llamarse, genéricamente, Venezuela.
En efecto, toda la costa venezolana, incluido el golfo de Venezuela, había sido recorrida una y otra vez entre 1499 y 1528, y había quedado, en consecuencia, debidamente explorada y ubicada como territorio de Tierra Firme, bajo la jurisdicción del gobierno presidido por la Real Audiencia de Santo Domingo desde su creación en 1511, y con más fuerza, a partir de su reimplantación en 1526. El 8 de junio de 1501 se capituló con Alonso de Ojeda el descubrimiento y gobernación de una provincia creada jurídicamente por real cédula del 28 de junio de 1500. Esta provincia, entregada a Ojeda, se denominó Gobernación de Coquivacoa: comprendía como límites el Cabo de la Vela por el oeste y el cabo de Chichiriviche por el este. El 10 de junio de 1501 los Reyes Católicos, nombraron a Alonso de Ojeda «nuestro Gobernador» de la mencionada provincia. El resultado práctico de la toma de posesión de la tierra de Coquivacoa puede resumirse en 3 aspectos: un conocimiento detenido de la costa, desde el Cabo de la Vela hasta Chichiriviche, incluido el golfo de Venezuela; la aparición del nombre de Venezuela en el mapa que Juan de la Cosa produjo en el año de 1500, donde queda diseñada la costa septentrional de Suramérica y se coloca el nombre de Venezuela en un determinado lugar del golfo; y la creación de una ciudad que solo se mantuvo en pie durante unos meses, con el nombre de Santa Cruz, fundada por Ojeda en mayo de 1502, posiblemente en la bahía de Castilletes, cerca de la laguna de Cocinetas. Si bien en 1526 se concede a Martín Fernández de Enciso, vecino de Santo Domingo, amigo y auxiliar de Ojeda, buen conocedor de las tierras descubiertas en el continente, una capitulación para descubrir y poblar las tierras del golfo, junto al Cabo de la Vela, este intento fracasó. En cambio, a partir de la creación de la gobernación y capitanía general -establecida por la real cédula del 27 de marzo de 1528- ya no habrá solución de continuidad. Es decir, la provincia de Venezuela, con el carácter político-administrativo de gobernación y capitanía general, existirá desde 1528 hasta el 19 de abril de 1810. El nombre genérico de provincia se da en la documentación de los siglos XVI, XVII y XVIII con sentido territorial. La provincia de los Caracas fue, antes de la fundación de la ciudad, denominación para las tierras habitadas por indígenas así llamados. Ya en el ámbito jurídico del Estado español en Indias, «provincia» se aplica más propiamente a la unidad básica de la división político-territorial establecida desde el primer momento con el título de gobernación y capitanía general. Esto significa que una provincia jurídica es una unidad gobernada por un gobernador y capitán general: un solo funcionario recibe el poder para la administración política y para la jurisdicción militar. En el capítulo III de las Capitulaciones contenidas en la real cédula de la creación de la provincia de Venezuela, se establece claramente el rango para el gobierno provincial: «seáis nuestro Gobernador y capitán general de las dichas tierras». Más aún, se asignan sueldos distintos para cada una de las magistraturas en el orden jurídico de las prioridades: «con salario en cada un año por nuestro Gobernador de 200.000 maravedís y por capitán general 100.000 maravedís que son por todos 300.000 maravedís». Es evidente que hasta en el salario se hace la diferencia: primero gobernador y anexo a ese cargo político, civil, el de capitán general, de carácter militar, con menor sueldo. Cuando se nombra el primer gobernador de la provincia de Venezuela, el 13 de octubre de 1529, se expiden 2 títulos. Uno para gobernador: «por ende, guardando y cumpliendo la dicha capitulación y asiento por la presente es nuestra merced y voluntad que ahora y de aquí adelante por todos los días de vuestra vida [...] seáis nuestro Gobernador de dichas tierras y provincias que así descubriéredes y pobláredes, y que hayáis y tengáis la nuestra justicia civil y criminal en las ciudades villas y lugares que en ella se poblaren de aquí en adelante con los oficios de Justicia que en ellas hubiere». La letra del documento jurídico fue clara desde el primer momento y se mantuvo inalterable a lo largo de los nombramientos de gobernadores y capitanes generales mientras la provincia de Venezuela formó parte del Estado español en Indias. Cambió la filosofía política, el estilo de gobierno y, como era natural, la estructura misma de la división político-territorial, especialmente con el proceso de unificación de las provincias que formarán la jurisdicción de la Real Audiencia de Caracas, base del territorio de la Venezuela que surgirá el 5 de julio de 1811. El título de capitán general se expide en documento aparte. El texto, en el caso del primer gobernador, dice: «Seáis nuestro Capitán General de las dichas tierras y provincias que así descubriéredes y pobláredes por todos los días de vuestra vida, y que así como nuestro Capitán General vos y vuestros Lugartenientes y no otra persona alguna uséis del dicho oficio». Este doble nombramiento para el primer magistrado provincial se mantiene, no solo durante los siglos XVI y XVII, mientras reinó la Casa de Austria, sino también durante el siglo XVIII, bajo el reinado de los Borbones, incluso después de realizadas las reformas político-administrativas de Carlos III, por las cuales se unificó el territorio de las 6 provincias que formarán la jurisdicción de la Real Audiencia de Caracas, a partir de 1786.
El primer gobernador y capitán general de la provincia de Venezuela fue Ambrosio Alfínger, quien llegó a Coro el 24 de febrero de 1529. Desde este año hasta 1545, la provincia estuvo oficialmente bajo el gobierno de la concesión dada a los llamados Welser. Se sucedieron Ambrosio Alfínger, Juan Seissenhofer, Jorge de Spira, el obispo de Puerto Rico Rodrigo de Bastidas, Antonio Navarro y el licenciado Juan de Frías, hasta el nombramiento de Juan Pérez de Tolosa, el 12 de septiembre de 1545, desde cuando se suceden 51 gobernadores y capitanes generales más, hasta Vicente de Emparan y Orbe. La Regencia, encargada del gobierno por ausencia de Fernando VII en el trono español, nombró el sucesor de Emparan el 29 de abril de 1810. En el real documento se expresa el doble carácter del magistrado regional. Léase: «Don Fernando Séptimo por la Gracia de Dios etc. Y en su Real Nombre el Consejo de Regencia de España e Indias. Por cuanto se halla vacante el Gobierno y Capitanía General de las Provincias de Venezuela con la presidencia de mi Real Audiencia que reside en la ciudad de Caracas [...] he venido [...] en nombraros a vos [...] Don Fernando Miyares [... ] seáis Gobernador y Capitán General de dichas Provincias de Venezuela». Todas y cada una de las provincias creadas durante el siglo XVI en los territorios que formarán la jurisdicción de la Real Audiencia de Caracas, desde su creación en 1786, territorio correspondiente a lo que será la República de Venezuela en 1811, reconstituida en 1830, de acuerdo con el principio del uti possidetis juris, fueron jurídicamente creadas con el carácter de gobernación y capitanía general. Así la provincia de Margarita, establecida en 1525, fue gobernación y capitanía general, sin solución de continuidad, hasta 1777. Igualmente la provincia (gobernación y capitanía general) de Nueva Andalucía, llamada solo en el siglo XVIII de Cumaná, por su capital, mantuvo su rango de unidad político-administrativa, como tal gobernación y capitanía general desde su creación en 1568 hasta 1777. Estas 3 provincias (gobernaciones y capitanías generales) estaban sujetas a la Real Audiencia de Santo Domingo. Las 3 provincias interioranas fueron: la provincia (gobernación y capitanía general) de La Grita, vigente entre 1570 y 1607. Su territorio se anexó al de Mérida para crear un corregimiento, desde 1607 hasta 1622. En este año, el corregimiento se convirtió, con todo su territorio de La Grita y Mérida en la provincia (gobernación y capitanía general) de Mérida. En 1676 se anexó a esta provincia la jurisdicción de la ciudad de Maracaibo (formaba parte de la provincia de Venezuela). Comienza a denominarse provincia (gobernación y capitanía general) de Maracaibo a todo el extenso territorio constituido por los que fueron de La Grita, de Mérida y ahora Maracaibo. Históricamente la provincia crece de tamaño y cambia de nombre, de acuerdo con la importancia de su capital. El gobernador y capitán general recibió el título de corregidor durante los años de 1608 a 1625. Esta inmensa provincia fue jurisdicción de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá, hasta 1777. Igual ocurrió con la provincia de Guayana, creada en 1569 y con la de Trinidad.
Las 3 provincias dependientes de la Real Audiencia de Santo Domingo (Venezuela, Margarita y Nueva Andalucía o Cumaná) y las 3 provincias interioranas dependientes de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá (La Grita-Mérida-Maracaibo, Guayana y Trinidad) fueron unificadas para su gobierno en un proceso que va desde 1776 hasta 1793. En primer lugar se estableció la Intendencia de Ejército y Real Hacienda en 1776, con sede en Caracas y jurisdicción en las 6 Provincias. El 8 de septiembre de 1777, Carlos III expidió una real cédula por la cual el capitán general de la provincia de Venezuela tendrá jurisdicción en las otras provincias que pasan a convertirse en comandancias, subalternas, en cuanto a la jurisdicción militar, del capitán general de Venezuela. Pero cada gobernador seguía siendo gobernador en su provincia. En 1786 se crea la Real Audiencia de Caracas, implantada al año siguiente. A partir de ese momento, el magistrado de la provincia de Venezuela será: gobernador de la provincia de Venezuela, capitán general en todas las provincias y presidente de la Real Audiencia de Caracas. Así se expresa en los nombramientos que se hacen durante el período, como se ha visto con el de Fernando Miyares. Naturalmente que la fuerza de la capitanía general desde 1777 se sobrepone al título de gobernador e incluso al superior de presidente de la Real Audiencia en el ejercicio diario del poder. Como durante el siglo XVIII, España estuvo en continua guerra para defenderse de la agresión inglesa, la mayoría de los gobernadores y capitanes generales de las provincias venezolanas fueron militares. De allí que suele hablarse de la capitanía general de Venezuela como de una entidad política establecida en 1777. El funcionamiento administrativo fue, por el contrario, suficientemente claro: en 1777 se amplía a todas las provincias la jurisdicción militar del capitán general de Venezuela. En 1786 la jurisdicción política corresponde a la Real Audiencia de Caracas, presidida por el mismo funcionario que es gobernador de su provincia de Venezuela, capitán general de todo el territorio y presidente de la Real Audiencia, que es el organismo superior de gobierno igualmente para todas las provincias. Así, pues, la capitanía general de Venezuela existe desde 1528. En 1777 se amplía a todas las provincias: Margarita, Trinidad, Nueva Andalucía, Guayana, Maracaibo (que es la misma de La Grita y Mérida). Apenas terminado ese proceso, Barinas fue desgajada de la provincia de Maracaibo y convertida en una comandancia general (1786) y luego en provincia.
Temas relacionados: Capitanía general; Caracas, provincia de; Régimen español; Venezuela, integración territorial de.
Autor: Guillermo Morón Bibliografía directa: Morón, Guillermo. Historia de la provincia de Venezuela.Caracas: Concejo Municipal del Distrito Federal, 1977.